El Modernismo holístico de Studio Gild

Fundado en 2014 por las cofundadoras Melissa Benham, Jennie Bishop y Kristen Ekeland, Studio Gild se inspira en el amor que comparten por la arquitectura limpia y la belleza sutil. Su experiencia combinada en diseño comercial, minorista y residencial permite al colectivo ofrecer interiores refinados con un estilo perdurable.

Tras haber perfeccionado un ojo colaborador que Architectural Digest considera versátil y sofisticado, el enfoque de diseño del trío fomenta relaciones únicas entre artesanos y clientes, a la vez que hace hincapié en los detalles bien pensados. El meticuloso dorado de cada proyecto es un reflejo de la estética y el nombre de la empresa. Los ambientes resultantes son sofisticados, provocativos y atemporales.

Studio Gild ha aparecido en Architectural Digest, Elle Décor, Domino, Dwell, Harper's Bazaar y The New York Times. Con oficinas en Chicago y Los Ángeles, la empresa de diseño acepta proyectos de costa a costa.

¿Cómo se inició en el mundo del diseño? Cuéntenos su historia.

Directora y cofundadora Kristen Ekeland: Mi abuelo materno era ilustrador profesional y mis dos abuelas artistas plásticas, así que llevo el arte y el diseño en la sangre. Siempre supe que quería ir a la escuela de arte y me siento afortunada de que me apoyaran y alentaran a seguir una carrera en el diseño. Pensé que quería seguir los pasos de mi tía en el diseño gráfico, pero durante unas prácticas universitarias en Londres me di cuenta de que me entusiasmaba más el mundo del interiorismo.

¿Cómo describiría su estilo personal y cuál es la firma personal que hace que sus proyectos sean únicos?

Kristen Ekeland: Suave, moderno y ecléctico. Me encanta escaparme a mi casa después de un día ajetreado y encontrar un espacio para relajarme y desconectar que sea tan cómodo como bonito. Las paletas de colores sutiles y el "menos es más" suelen ser mi mantra personal de diseño.

Los proyectos de Studio Gild son únicos porque no tienen un aspecto definido per se. Tenemos tres fundadores al timón y cada cliente busca algo diferente que refleje su estilo personal. Intentamos huir de las modas y diseñar espacios dinámicos que resistan el paso del tiempo. No nos asusta sobrepasar los límites para crear algo fresco pero duradero para las rutinas diarias de la vida. Al fin y al cabo, las casas son para vivirlas y disfrutarlas.

¿En qué se inspiran para sus proyectos?

Directora y cofundadora Jennie Bishop: Viajar es una fuente unificadora para los tres, estar inmersos en diferentes culturas y entornos nos sirve como fuente de energía creativa.

¿Cuál es la pieza decorativa que más le gusta seleccionar para sus clientes y por qué?

Kristen Ekeland: La lámpara de araña de la mesa de comedor. Es el momento de iluminación en el que los clientes están dispuestos a invertir más, ya que es la pieza en torno a la cual se reunirán la familia y los invitados. Esta luz se convierte en el momento artístico del espacio, independientemente de si el comedor principal es la mesa banqueta de la cocina informal o un comedor formal para 12 comensales.

En un mundo hiperdigital, ¿con qué frecuencia recurre a las redes sociales en busca de inspiración?

Kristen Ekeland: Pinterest es nuestro principal recurso para encontrar y compartir imágenes de inspiración, tanto internamente como con los clientes. La plataforma cuenta con una amplia biblioteca de fotografías de arquitectura, moda e interiores de diseñadores de todo el mundo. Creamos tableros de proyectos en Pinterest que permiten al equipo de diseño acceder a las ideas y compartirlas al instante. También nos permite subir imágenes que hemos descubierto en revistas impresas, sitios web e Instagram y guardarlas todas en un mismo sitio. Se acabaron los días de guardar montones de recortes de revistas andrajosos para transmitir una idea.

¿En qué proyecto le gustaría trabajar?

Kristen Ekeland: En los comienzos de Studio Gild, nos contrataron para revivir la finca de Howard Van Doren Shaw de 1916 en Lake Forest, llamada Stonebridge. La casa había tenido muchas vidas diferentes desde que era una residencia privada, y nuestra tarea era ayudar a restaurarla y revivirla para convertirla en una "Soho House", por así decirlo, para la comunidad de la costa norte. Por desgracia, la ciudad nunca aprobó los planes del promotor para la finca. Verlo revivir sería el proyecto de mis sueños".

Melissa Benham, directora y cofundadora: Cualquier proyecto que permita un enfoque holístico y la oportunidad de tocar la arquitectura y el paisaje, además de muebles, obras de arte y accesorios. También me encantan los clientes que repiten. Empezar de cero con la confianza establecida y la eficiencia de una taquigrafía bien perfeccionada es excepcionalmente soñador.

¿Qué época le inspira más en términos de estética?

Jennie Bishop: Me atrae lo estrafalario, así que los años setenta y ochenta me tocan la fibra sensible. Hay una audacia en esos periodos que me inspira.

Melissa Benham: El modernismo siempre ha resonado en mí. Probablemente me remonte al profundo amor de mi abuelo alemán por la Bauhaus, que nos transmitió a mi madre y a mí. Gran parte de la ideología de esa época sigue siendo relevante hoy en día, incluido el énfasis en la conexión con el exterior, la creencia de que la forma debe seguir a la función y el ideal de que el diseño de calidad debe ser accesible para todos.