Bodema

El diseño según Bodema es sofisticado, cálido, personal. Capaz, a través de cada proyecto, de decir algo nuevo que permanezca en el tiempo. Estímulos e ideas nacen también de la colaboración con arquitectos y diseñadores. Hacia 2012 la relación con Giuseppe Manzoni se estrecha y da como resultado colecciones que reflejan con coherencia la filosofía de la empresa: diseñar muebles que suenen en la vida cotidiana de quien los vive.

El placer de relajarse en su sillón o sofá favorito, sintiendo su originalidad y calidez. Una variación particular en la construcción o en las medidas. Una costura inusual y un acolchado más rico. Un color elegido entre un sinfín de matices posibles. Diferencias, a veces imperceptibles, pero que hacen de esa pieza algo único. Una forma aún más acogedora y confortable. Porque Bodema concibe el diseño también como un cuidadoso trabajo de sastrería en los detalles. La empresa se ha mantenido deliberadamente pequeña para ser siempre
rápida, proactiva, dispuesta a satisfacer las demandas y deseos individuales. Sus productos de serie tienen el carácter inimitable de la intervención manual. Un trabajo realizado a mano para resaltar la belleza única de una textura, de una línea suave y sinuosa o de una geometría rigurosa. Para Bodema, la calidad es un elemento vivo, en constante evolución.
Cada proyecto es el resultado de una investigación. La inspiración puede venir de una innovación tecnológica recién aparecida en el mercado o, al contrario, la idea nos empuja a encontrar la mejor tecnología para conseguirla.

En la dimensión global de los mercados y las ideas, las raíces son un activo valioso. El fil rouge de una historia que comienza en los años 60 y 70 del siglo pasado. La aventura de una familia y de una empresa completamente italiana. Es la época del boom económico y el diseño Made in Italy vive un momento de gran fervor. En
una pequeña fábrica en el corazón de Brianza trabajan a la velocidad del rayo. La planta se encuentra en el barrio de Meda, famoso desde siempre por sus productos tapizados y por la habilidad de sus artesanos tapiceros. Uno de ellos, Giulio De Mango, ya había abierto una década antes su empresa. Empezó como contratista y luego, entre los pioneros de un sector en creciente expansión, lanzó su propia marca. Bodema. Desde hace casi 50 años una empresa familiar, hoy en su segunda generación. Una trayectoria evolutiva, abierta a escenarios internacionales
. Y una forma única, desde entonces, de pensar y construir sofás, sillones, camas y sofás-cama. Un saber hacer y un sentido de la belleza que alimentan su creatividad. En la empresa se elaboran tendencias, que marcan nuevos estilos de hogar. Colores, materiales, formas, funciones. Y una fascinación por todo lo que es mecanismo y movimiento. Sofás que adoptan formas diferentes y cambian gracias a ingeniosos trucos tecnológicos. Sistemas de asientos en los que la modularidad siempre encuentra nuevas soluciones. Sofás convertibles que ennoblecen la idea de sofá-cama, de mueble de servicio
a objeto elegante y diferenciador.