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Roma Bella: Hotel Vilòn

Sumérjase en unas auténticas vacaciones romanas en el Hotel Vilòn, a pocos pasos de la Plaza de España y con unas vistas impresionantes del Palazzo Borghese. Disfrute de un ambiente inspirado en el Art Decó con toques de hospitalidad contemporánea y aproveche al máximo una experiencia sin precedentes de bienestar visual y sensorial en el corazón de la Ciudad Eterna.

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Célebre por artistas, cantantes y escritores de renombre, Roma es portadora de una cantidad excepcional de historia y tradiciones capaces de inspirar a todo caminante y huésped que se embarque en la experiencia de visitar la Ciudad Eterna. Al pasear por los restos históricos del Imperio Romano y los impresionantes jardines construidos en el interior de los antiguos Palazzi, todo el mundo puede respirar la conmovedora atmósfera de encontrarse en una época diferente.

Roma también es conocida por sus innumerables tesoros ocultos, desde los secretos que se esconden tras las calles más concurridas hasta joyas perfectas como los numerosos hoteles boutique construidos en el interior de edificios y casas rehabilitados. Situado en Campo Marzio, en el centro de la ciudad, el Hotel Vilòn es uno de estos hallazgos inesperados, que lleva el encanto antiguo del lugar combinado con lujosas soluciones de hospitalidad.

El Hotel Vilòn es un palacio històrico del siglo XVI que perteneciò a la familia Borghese y que todavìa da al Palazzo Borghese, ofreciendo una de las mejores vistas de la ciudad y del ambiente del vibrante barrio. A poca distancia a pie, los huéspedes pueden llegar a la Plaza de España y al Panteón. El hotel es el punto de partida perfecto para vivir una auténtica experiencia romana, ya que su entrada se encuentra en una de las estrechas calles adoquinadas de Campo Marzio, llamada Vicolo del Melangolo, que desemboca en el río Tíber. Antaño conocida como la "Casa anexa al Palazzo Borghese", esta elegante e íntima propiedad ofrece una nueva visión del lujo romano, ideal para una estancia relajante y cuidada.

El hotel boutique consta de 18 espaciosas habitaciones y suites contemporáneas, con vistas elevadas a los jardines privados restaurados del Palazzo Borghese y a un elegante patio privado. El proyecto está vinculado a muchos nombres ilustres de la escena romana: diseñado originalmente por el escenógrafo Paolo Bonfini, el inmueble se enriqueció con la colaboración del fotógrafo florentino Massimo Listri y el diseñador de interiores Giampiero Panepinto. Influenciado por su historia, el hotel está repleto de numerosas obras de arte por todas las habitaciones y espacios de estar.

La cuidada selección de mobiliario se inspira en el diseño Art Déco, para rememorar la elegancia de la Roma de los años 50 y 60. Al decorar cada habitación con su propio estilo individual de tonos pastel, neutros, ribetes negros y detalles en tonos joya, cada habitación está conectada a la vez que tiene un toque individual que se adapta a todas las preferencias. Las dos zonas diferentes para comer, el Restaurante y Bar Adelaide, familiarmente llamado In Salotto (en el salón) y el encantador jardín exterior, enriquecen el hotel con lujosas exploraciones y experiencias gastronómicas.

El hotel es un concepto cuidadosamente construido que tiene como objetivo proporcionar una experiencia sin igual a sus huéspedes, donde la decoración y el diseño son sólo el comienzo de la oferta de hospitalidad con estilo, pero la energía en todo el hotel ofrece un verdadero sabor de Roma, tanto del pasado como del presente y donde el tiempo parece detenerse. Pasear por la Plaza de España, la Fontana de Trevi, el Panteón y los barrios comerciales cercanos es sólo el punto de partida para una visita verdaderamente inolvidable, que comienza y termina con el estilo del Hotel Vilòn.

El hotel es un concepto cuidadosamente construido que tiene como objetivo proporcionar una experiencia sin igual a sus huéspedes, donde la decoración y el diseño son sólo el comienzo de la oferta de hospitalidad con estilo, pero la energía en todo el hotel ofrece un verdadero sabor de Roma, tanto en el pasado como en el presente y donde el tiempo parece detenerse. Pasear por la Plaza de España, la Fontana de Trevi, el Panteón y las zonas comerciales cercanas es sólo el punto de partida para una visita inolvidable, que comienza y termina con el encanto del Hotel Vilòn.