
Design Icon: Angelo Mangiarotti
Descubra a Angelo Mangiarotti, arquitecto, diseñador y urbanista italiano famoso por su dedicada y revolucionaria investigación sobre distintos materiales de producción. Desde su impactante arquitectura milanesa, que marcó la historia de la ciudad, hasta sus icónicos diseños de productos, el toque de Mangiarotti sigue presente hoy en día en nuestro paisaje cultural y en las prácticas de la industria. Profundice en su historia y eche un vistazo a una selección de los productos que diseñó.
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Angelo Mangiarotti nació en Milán el 26 de febrero de 1921 y se licenció en Arquitectura en el renombrado Politécnico de Milán. Ese mismo año, aprovechó la oportunidad para asistir a la preparación de la VIII Trienal, lo que le introdujo de lleno en el vibrante ambiente del mundo del diseño milanés. Posteriormente se trasladó a Estados Unidos como profesor visitante en el Instituto de Tecnología de Illinois, donde conoció a Frank Lloyd Wright y Walter Gropius, entablando importantes relaciones para la definición de su estilo personal.
De vuelta en Italia, en 1955, se embarcó en una asociación de cinco años abriendo un estudio con su colega y amigo Bruno Morassutti. Durante este periodo, Mangiarotti dio sus primeros pasos en el panorama arquitectónico de Milán. De aquella época es la famosa "Casa a tre cilindri" del barrio de San Siro, un bello ejemplo de arquitectura perfectamente conjugada con el urbanismo y el proceso de renovación. El estudio amplió este enfoque innovador de la investigación estructural con el diseño de un complejo de apartamentos en Via Quadronno, y más tarde con el encargo del nuevo Quartiere Feltre, un esfuerzo conjunto con un grupo de aclamados arquitectos milaneses.
Su visión arquitectónica se reflejó profundamente en estas primeras obras: Mangiarotti veía la disciplina como una forma de arte funcional, un proceso artesanal que debía priorizar la funcionalidad y el rigor intelectual. Esta perspectiva se extendía a su opinión sobre el diseño industrial, que abordaba con el mismo cuidado de un artesano y la precisión de un urbanista.








